Paso 1.- Aceptar de corazón al Señor Jesús como único
Salvador
- Aceptar a Jesucristo como nuestro Señor y Salvador incluye algo más que una simple decisión mental. "Aceptar", en el sentido bíblico, significa creer, confiar y seguir. Muchos son los que dicen que aceptan al Señor Jesús, pero su vida no corresponde con la decisión tomada. Cambian Su nombre por otro, no depositan su fe en Él, dicen que todos los caminos llevan a Dios. Se someten a los "santos" y depositan toda su confianza en ellos. Incluso dicen que Dios es bueno y que el diablo no es tan malo, haciendo así aún más la voluntad de Satanás.
- Estas personas no pueden ser liberadas si proceden de esta manera, ya que Dios no es un Dios de confusión. El verdadero seguidor de Jesús no puede estar entre el sí y el no. No puede estar entre dos pensamientos. Esto es absurdo a los ojos de Dios. Nadie puede estar en la luz y en las tinieblas al mismo tiempo porque o la luz disiparía las tinieblas, o éstas sofocarían a la luz.
- Aceptar al Señor Jesucristo significa abandonar la antigua vida. Dar nuestra espalda al error y someterse al Señor por medio de Su Palabra. Significa negarse a sí mismo, tomar la cruz e ir en pos de Él. Si hace esto, usted estará preparado para todo, enfrentarse a mil obstáculos o resistir al mundo entero, no será difícil.
- Imagínese una tempestad en el mar donde su barco se está hundiendo y no hay nada a su alrededor que lo pueda ayudar. Pero, de repente, aparece alguien en un barco grande y fuerte que le extiende una mano. Por supuesto que usted irá a tomarla aunque no conozca quien se la extiende. Siempre estará agradecido que en la hora de la aflicción lo salvara de una muerte segura. Así hace el Señor Jesús con nosotros. Aunque alguien no le conozca bien, Su mano siempre está extendida para librarlo de la muerte. Acéptelo como Salvador, ya que Su mano está extendida para librarlo de todo mal, para liberarlo completamente.
Paso 2.- Participar en los servicios religiosos
- La participación en las reuniones de nuestra iglesia es un factor muy importante para aquellos que, verdaderamente, desean tener una nueva vida, apartada de la influencia de los demonios.
- Hay demonios que no se manifiestan en las primeras reuniones debido a que están esperando afuera de la iglesia, esperan que la persona salga, o incluso en su casa, pero en realidad están "cargados".
- Hay casos en que la persona es deseada por centenares de demonios y ellos luchan por poseerla.
- Sepa que el diablo nunca estará satisfecho de perder una batalla, él buscará siempre rehabilitarse y esa es una de las principales razones por las que aquel que desea una liberación total y completa no puede dejar de participar en las reuniones de la iglesia.
Paso 3.- Buscar el bautismo
con el Espíritu Santo
- El hombre fue destinado por Dios para ser templo del Espíritu Santo. Pero su rebelión dejó que los espíritus inmundos dominen su cuerpo, su mente y su alma, pero mientras tanto, el Señor concede Su Espíritu a quien lo busca.
- El bautismo con el Espíritu Santo es considerado como la segunda bendición, pues se produce después de la
salvacion espiritual del alma, después de la entrega y de la liberación. La persona debe buscar ardientemente este bautismo.
Paso 4.- Andar en Santidad
- La palabra "santo" significa, en su acepción bíblica, "separado". Nadie puede ser liberado de satanás y los demonios y continuar haciendo la voluntad de ellos. Aquel que desea servir a Dios tiene que andar según Su voluntad. El apóstol Juan dice que aquel que está en Cristo debe caminar como Él anduvo. Es necesaria una conducta santa e irreprensible por parte de aquel que desea seguir a Jesús.
- Si usted, lector, desea en verdad la
salvacion espiritual del alma, no admita ninguna unión con el diablo. Camine con la cabeza bien alta sin tener de qué avergonzarse y sea sumiso a Dios por su libre y espontánea voluntad.
- Recuerde que no sólo basta dejar algunas cosas. Es necesario separar otras.
Paso 5.- Leer la Biblia diariamente
"Lámpara es a mis pies tu palabra y lumbrera a mi camino."
Salmo 119:105
- No puede haber una perfecta comunión con Dios sin el conocimiento de Su santa voluntad. Cuando Jesús venció al diablo, Él lo hizo usando la Palabra de Dios. Ella es la espada del Espíritu Santo. Cuando la usamos con fe nada hay en este mundo capaz de derrotarnos, pues ella penetra en lo más íntimo de nuestro ser hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos. Cuando es pronunciada por un siervo de Dios en el nombre del Señor Jesús, produce efectos extraordinarios.
- Todo aquel que desea vencer a Satanás debe conocer bien la Palabra de Dios, la Sagrada Biblia. El centurión le dijo al Señor Jesús que solamente pronunciara una palabra que su siervo sería sanado. ¡Dicho y hecho! La Palabra llegó hasta el siervo del Centurión y realizó el milagro. Es a través de esa maravillosa palabra que los mayores milagros han sucedido. Ella produce fe en nuestros corazones para resistir al diablo. Por eso es necesario conocerla profundamente
Paso 6.- Evitar las malas compañías
- Nuestra experiencia nos lleva a creer que uno de los puntos fundamentales para la liberación de una persona está en el hecho de desligarla totalmente de compañías que no profesen la misma fe. De ahí la verdad del refrán "Dime con quién andas y te diré quién eres". Tenemos razones suficientes para considerar este refrán de mucha importancia para el proceso de
salvacion espiritual del alma de una persona.
- Hemos visto personas que comenzaron una vida gloriosa en la iglesia pero, poco tiempo después, llevados por las malas compañías, terminaron desviándose de su comunión.
- Debe procurar amistades que tengan su misma fe y evitar las conversaciones que no edifican, así como las discusiones y contactos que puedan debilitar su
salvacion espiritual del alma.
Paso 7.- Ser bautizado
- Todas las bendiciones de Dios son prometidas para aquel que creyere y fuere bautizado, y eso debe suceder inmediatamente después que la persona haya aceptado al Señor Jesucristo como su Salvador personal. El bautismo en las aguas es la mortificación de los hechos en la carne, la sepultura del viejo "yo" y el surgimiento de una nueva criatura limpia y lavada para una vida nueva.
- Cuando aceptamos a Jesús como nuestro Salvador personal no podemos dejar que las manías o malas costumbres o cualquier hecho de la carne estorben nuestra relación con el Señor. Aquel mal genio, el orgullo, la vanidad, etc, son productos de la carne y precisamente deben ser abandonados. ¿Cómo nacer de nuevo sin morir? No podemos quedar con dos naturalezas, una pecaminosa y otra convertida. Morir con Cristo significa que nuestra carne no puede dar más frutos.
- Tenemos que vivir según el Espíritu Santo, una nueva
vida
Paso 8.-Frecuentar las reuniones de miembros
- No cabe la menor duda que las personas, al convertirse a Cristo, necesitan de mayores conocimientos para poder recorrer el camino cristiano. Las reuniones de la iglesia, donde los miembros se reúnen para alabar a Dios y aprender Su Palabra, son las verdaderas aguas de refrigerio para el cristiano sediento. Necesitamos alimentar nuestra fe con la Palabra de Verdad, que nos arma contra las artimañas de Satanás.
Paso 9.- Ser fiel en los diezmos y
en las ofrendas
- Cuando alguien se propone seguir al Señor Jesús tiene que caminar según las normas que Él nos ha establecido. Somos nosotros los que acompañamos al Señor y, por eso, debemos dar oído a Su voz.
- La Biblia dice en Malaquías 3:10 que hay un espíritu devorador, causante de toda miseria, de toda desgracia y del caos en la vida de aquellos que roban al Señor en los diezmos y en las ofrendas.
- Cuando Dios creó al hombre lo hizo perfecto y lo colocó sobre Su creación. Dios le dio el derecho y el privilegio de administrar todos los bienes de la Tierra, pero a cambio le pide una décima parte de todo su trabajo. Hizo esto para que lo reconozcamos como Señor de todas las cosas y nos consideremos como Sus siervos.
- Si le somos fieles, Él lo será con nosotros y jamás dejará de faltarnos en nuestro sustento, ni permitirá que los espíritus devoradores actúen en nuestra vida.
- De esta forma, querido lector, Dios es glorificado con las primicias de todos nuestros frutos, y es preferible el 90% con Él que el 100% sin su provisión. Dar los diezmos y las ofrendas significa realmente amar la obra de Dios y estar preocupado en llevarla adelante.
"Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi Casa: Probadme ahora en esto, dice el Señor de los ejércitos, a ver si no os abro las ventanas de los cielos y derramo sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde. Reprenderé también por vosotros al devorador, y no os destruirá el fruto de la tierra, ni vuestra vid en el campo será estéril, dice el Señor de los ejércitos."
Malaquías 3:10-11
Paso 10.- Orar sin cesar y estar vigilante
- Tal vez usted estará pensando que este paso es difícil, pero en realidad es el más importante para su completa liberación. Orar sin cesar es estar siempre en espíritu de oración, siempre en contacto con Dios. ¿Cuántas veces nos encontramos hablando con alguien y, al mismo tiempo, orando para que su problema sea solucionado?
- Nuestras manos pueden estar atadas, pero nuestro espíritu debe estar ligado al de Dios. En este mandamiento están comprendidas las oraciones silenciosas y las oraciones a viva voz, ya sean hechas a solas, en grupo, de pie o de rodillas.
- Cuando estuviéramos en oración, vigilando siempre para no ser engañados, satanás no encontrará una brecha por donde entrar en nuestra vida.
- La Biblia nos declara que el diablo vive rodeándonos, rugiendo como un león, procurando devorar a aquellos que están espiritualmente dormidos. Cuando oramos y vigilamos, el diablo no solamente se aparta de nosotros sino que se dobla delante de la oración. No hay demonio que resista el poder existente en la persona que lleva una vida de oración y vigilancia delante de la presencia de Dios.
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